El acero inoxidable es un material de superficie muy lisa y no poroso. Esto facilita su limpiado y evita que las bacterias puedan reproducirse.
Es una materia muy fácil de limpiar y con gran resistencia a la corrosión, por esta razón la mayor parte de las cocinas industriales son de acero inoxidable. Además tiene una estética de líneas modernas y atractivas.
¿Cómo limpiar…?
1) Las marcas de dedos: sólo se necesita una bayeta de microfibra un poco húmeda.
2) Las manchas de grasa: limpiar la zona con un paño, jabón y agua caliente. Si la mancha se resiste, aplicar en el paño alcohol o vinagre y frotar. A continuación lavar a fondo hasta que la mancha desaparezca.
3) Manchas de cal: usar un limpiador específico de cal, si la mancha persiste, poner sobre la mancha un vaso de agua con vinagre y dejar actuar.
Consejos:
1) Es aconsejable no usar nunca estropajos aunque esté indicado que no raya, ya que esta superficie es muy sensible.
2) En el caso en el que encontremos arañazos ligeros propios del uso diario, podemos aplicar un poco de aceite vegetal con papel, para disimularlos.
3) Hay varios productos con los que hay que tener especial cuidado como son los disolventes o los desinfectantes con lejía, ya que pueden dañar la superficie. También se deben evitar los productos abrasivos ya que pueden dejar marcas o arañazos.
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